El relieve en un punto determinado de la superficie terrestre es el resultado de la interacción de los procesos endógenos y exógenos. Los primeros actúan como creadores de las grandes unidades morfoestructurales producidas por movimientos de componente vertical y los segundos, como desencadenantes de una continua acción que tiende a rebajar el relieve originado. Esta lucha constante se manifiesta a diferentes escalas.
La Geomorfología Tectónica tiene como fin principal el estudio de los procesos tectónicos creadores de relieve que interfieren con los procesos superficiales que tienden a erosionarlos.
Keller y Pinter (1996) señalan que la Geomorfología Tectónica se puede definir de 2 maneras:
- El estudio de las formas producidas por procesos tectónicos.
- La aplicación de principios geomorfológicos para resolver problemas tectónicos.
Marcadores Geomorfológicos
Los marcadores geomorfológicos son características del modelado, tal como terrazas fluviales y marinas, que pueden utilizarse para analizar las huellas de la deformación.
a) Marcadores geomorfológicos planares: Las terrazas fluviales se utilizan frecuentemente para estudiar la deformación por fallas y plegamientos a partir de los perfiles longitudinales de las terrazas. Las terrazas marinas, playas marinas y lineas de costas también son marcadores de este tipo. Las terrazas marinas se originan a partir de las variaciones del nivel del mar a lo largo del tiempo. Los cambios del nivel del mar fueron importantes durante el pleistoceno y alcanzaron un descenso de 150 m hace unos 18000 años. El constante ataque de la linea de costa por las olas origina terrazas marinas erosivas o plataformas de abrasión que presentan una inclinación de alrededor de 1 grado. Otros marcadores son: los deltas, superficies de erosión, abanicos aluviales, etc.
Plataformas marinas que se han originado por el ascenso constante desde el inicio del Cuaternario. Sur del Perú. |
b) Marcadores geomorfológicos lineales: Los marcadores planares suelen ocupar grandes extensiones. No obstante, los marcadores lineales y aquellos llevados a cabo por el hombre pueden utilizarse para determinar la deformación. Los cursos de los ríos pueden desplazarse por fallas en dirección y pueden medirse los desplazamientos laterales. Los cordones glaciares pueden utilizarse también como marcadores lineales, se pueden medir fácilmente los desplazamientos laterales generados por la actividad de fallas.
BIBLIOGRAFÍA:
Mateo Elorza Gutierrez .: “GEOMORFOLOGÍA”.Editorial Prentice-Hall 2008.
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