La mayor parte de la superficie del planeta Tierra (70.8%: 362 millones de km2) está cubierta por océanos y mares. Los sistemas marinos son altamente dinámicos y están interconectados por una red de corrientes superficiales y profundas. La temperatura y salinidad del agua dan lugar a la formación de capas estratificadas y corrientes; en muchas regiones las surgencias rompen esta estratificación mezclando las capas y crean una heterogeneidad vertical y lateral en el ambiente marino. Los océanos ocupan un enorme espacio favorable para el desarrollo de la vida. A la vez determinan los climas y el tiempo, y son el motor que transporta el calor y el agua dulce de la atmósfera. En suma, contribuyen enormemente a la biodiversidad del planeta.
El mar, en donde se originó la vida, posee una enorme y poco conocida diversidad de regiones, ecosistemas, plantas, animales, microorganismos, genes y moléculas orgánicas. En apariencia homogéneo, es muy heterogéneo. Los grupos taxonómicos (esponjas, celenterados, algas, equinodermos, peces), muchos de ellos solo representados en el mar, contrastan con la diversidad terrestre de fanerógamas e insectos. Sin embargo, hasta ahora la biodiversidad marina ha sido menos estudiada que la terrestre.
Si se excluyen los insectos, 65% de las especies conocidas de la Tierra son marinas (Thorson 1971). Si se considera que la mayoría de los filos y taxa superiores están principalmente representados en el mar, quizá la biodiversidad genética y bioquímica sea aun mayor. En contraste, se estima que el número total de especies es mayor en los ambientes terrestres, ya que 75% de las del planeta son insectos. En el medio marino la facilidad de transporte por las corrientes marinas provoca que los estadios planctónicos de muchas especies se intercambien fácilmente entre hábitats y ecosistemas, lo cual tiende a reducir la diversidad.
El mar, como la tierra, es heterogéneo y presenta varios tipos de ecosistemas. Los marinos se clasifican relacionándolos con las zonas de vida (ej.: pelágicos, asociados a las masas de agua, y bentónicos, asociados a los fondos marinos), con los biotopos (de fondos y litorales arenosos, rocosos, etc.) o con las biocenosis características (ecosistemas de arrecifes de coral, de manglares, etc.). A su vez, cada zona se diferencia en costera (nerítica) u oceánica o marina, según se ubique respecto a la plataforma continental.
Fondo Marino |
En otras ocasiones la clasificación se basa en la disponibilidad de luz para la fotosíntesis y distingue dos zonas: la eufótica y la afótica; en esta última habitan organismos que viven en permanente oscuridad y por lo tanto dependen del aporte de energía de otros sistemas; también se pueden clasificar de acuerdo con criterios funcionales según la fuente de energía metabólica que utilizan los organismos que viven en el mar: fitoplancton, macroalgas, ecosistemas quimiosintéticos, etc. (Mann 1989).
En cuanto a la biodiversidad de las biocenosis, el sistema marino, al igual que el terrestre, se enriquece de los polos hacia el ecuador. Asimismo los sistemas bentónicos son más diversos que los pelágicos. En general, las tendencias coinciden con dos generalizaciones propuestas por Margalef (1974): en comunidades transitorias, explotadas o bajo condiciones ambientales muy fluctuantes, la diversidad es baja; por el contrario, los ecosistemas de ambientes estables tienden a aumentar su biodiversidad.
Ambientes Marinos |
Breve explicación del esquema
Consideramos primeramente a la superficie del mar por su orientación horizontal. La superficie marina se prolonga a dos metros de profundidad. La zona está marcada por la penetración de la radiación solar infrarroja incidente. Siguiendo la superficie, encontramos la subdivisión de la misma en zonas que han sido determinadas por la zona intermareal y los accidentes orográficos del fondo marino.
Regiones de la superficie marina
-Ambiente Litoral: es la región comprendida entre los límites de la marea alta y la marea baja. Su extensión y profundidad son variables. Es la región que marca la línea costera. Esta zona es rica en seres vivientes.
-Ambiente Pelágico: se extiende desde la línea de la marea baja hacia mar adentro. Su extensión en profundidad es variable. El ambiente pelágico se subdivide en dos regiones importantes:
- Ambiente Nerítico: Es el bioma nerítico. Está comprendido entre la línea de la marea baja y la terminación de la plataforma continental. Su extensión y profundidad son variables, pero en forma general podemos decir que es de 150 Km. mar adentro y unos 150 metros en profundidad, aunque existen océanos en donde su profundidad alcanza los 1500 metros. La vida se desenvuelve óptimamente en este ambiente debido a que sus aguas son cálidas y ricas en nutrientes. La mayoría de las plantas acuáticas multicelulares se desarrollan en este ambiente. Esta zona es la más rica en seres vivientes. Algunos autores consideran a la zona nerítica desde el nivel de la marea alta hasta el borde continental, esto es, incluyen toda la zona intermareal.
- Ambiente Oceánico: se extiende desde la terminación de la plataforma continental hacia mar adentro. Al igual que el ambiente nerítico, su extensión y profundidad son variables. En profundidad, el Ambiente Oceánico puede alcanzar los 14000 metros en las fosas oceánicas.
Regiones marinas verticales (en profundidad):
Verticalmente, o en profundidad, el ambiente marino se subdivide en dos zonas principales:
A) AMBIENTE EUFÓTICO: Está determinado por la penetración de la luz. Su límite inferior es donde la luz ya no incide más. Se subdivide en las siguientes zonas:
- Ambiente Epipelágico: Se extiende desde la superficie del mar hasta aproximadamente 100 metros de profundidad. Está limitado por la penetración de la luz, razón por la cual el ambiente epipelágico es el más rico en organismos productores o fotosintetizadores, tanto unicelulares (fitoplancton) como multicelulares (algas y plantas superiores) y animales. En donde hay luz prosperan los organismos que producen alimento y oxígeno y consecuentemente los organismos consumidores que obtienen su alimento de los productores. Por ello, al ambiente epipelágico se le denomina eufótico, es decir, con luz.
- Ambiente Fótico de Transición: Se encuentra entre el ambiente epipelágico o eufótico y el ambiente afótico (afótico significa “sin luz”). La luz pierde intensidad paulatinamente a medida que penetra en las aguas hasta los 200 metros de profundidad, en donde definitivamente toda la luz ya ha sido absorbida por el agua. En este ambiente la cantidad de productores es exigua, aunque aún existen organismos fotosintetizadores. La mayoría de los seres vivientes que habitan este ambiente de transición son carnívoros.
B) AMBIENTE AFÓTICO: Está determinado por la carencia de luz. En condiciones naturales la obscuridad es absoluta, de ahí su denominación "afótico", que significa "sin luz". Se subdivide en los siguientes ambientes:
- Ambiente Mesopelágico: Su extensión vertical comprende entre los 200 metros y los 1000 metros de profundidad. El límite superior puede determinarse por el borde de la plataforma continental, siempre y cuando este último se encuentre a una profundidad inaccesible para la luz.
- Ambiente Batipelágico: Está comprendido entre los 1000 metros y los 4000 metros de profundidad.
- Ambiente Abisopelágico: Se extiende desde los 4000 metros hasta el fondo marino, incluyendo el de las fosas marinas.
Ahora consideraremos el fondo marino en su orientación horizontal. Al fondo marino se le denomina Ambiente Bentónico.
Zonas del fondo marino
- Zona Litoral: Al igual que el ambiente litoral correspondiente a la superficie, la zona litoral se extiende desde la línea de la marea alta hasta la línea de la marea baja.
- Zona Sublitoral: Se extiende desde la línea de la marea baja hasta el borde de la plataforma continental. Es correspondiente al ambiente nerítico de las aguas superficiales.
- Zona Batial: Comprende desde el límite de la plataforma continental hasta descender en declive a los 4000 metros de profundidad.
- Zona Abisal: Es la continuación del fondo marino desde los 4000 metros de profundidad hasta el borde de las depresiones o fosas marinas.
- Zona Hadal: Se extiende desde los bordes de las fosas marinas hasta el fondo de las mismas.
Ambientes marinos y su relación con la paleontología
Los ambientes marinos son importantes en la paleontología porque el proceso de fosilización se dará mayormente en el mar.
La Fosilización es el conjunto de fenómenos fisicoquímicos por los cuales un organismo pasa al estado fósil. Por tanto, El proceso de fosilización supone una serie de transformaciones químicas que reemplacen los compuestos orgánicos del ser muerto por otras sustancias naturales (Ej.: calcita, sílice, pirita).
Importancia de los ambientes marinos |
REFERENCIAS:
- https://www.biodiversidad.gob.mx/pais/pdf/CapNatMex/Vol%20I/I05_Losecosistemasmar.pdf
- http://www.biocab.org/ambientes_marinos.html
- http://sds.yucatan.gob.mx/biodiversidad-yucatan/02Parte1_El_Estado/Capitulo1/07Ambientes_marinos.pdf
- http://sds.yucatan.gob.mx/biodiversidad-yucatan/02Parte1_El_Estado/Capitulo1/07Ambientes_marinos.pdf
0 comentarios:
Publicar un comentario